La importancia del sueño: 4 consejos para mejorar la calidad de tu descanso

En primer lugar, por qué es importante el sueño

El sueño es esencial para casi todos los procesos del cuerpo y desempeña un papel fundamental en mantener el bienestar físico y mental. ¿Aún te preguntas por qué debemos darle prioridad al sueño?

El sueño es importante por las siguientes razones:
 

• Beneficia las funciones cerebrales; incluyendo la cognición, la concentración, la productividad y el rendimiento 
• Puede contribuir a mantener o perder peso, así como maximizar el rendimiento físico 
• Favorece una función inmune saludable 
• Influye en la capacidad de regular las emociones 
   

1. Come bien para dormir bien

¿Sabías que lo que comes y el momento en que lo comes puede afectar tu sueño? Es mejor evitar las comidas pesadas justo antes de ir a dormir, así como la cafeína, el alcohol y los alimentos ácidos, picantes o con mucha azúcar o grasa.

Por supuesto, todas las personas son diferentes, pero consumir este tipo de comidas y bebidas en la noche hace que la mayoría no pueda dormir y dé vueltas en la cama mientras el sistema digestivo trabaja para procesar todo.

En lugar de eso, intenta hacer lo siguiente para descansar al máximo: 
 

• Consume la comida más pesada a mediodía 
• Lleva una alimentación equilibrada y rica en nutrientes 
• Los niños deben limitar su ingesta de azúcar 
• Los adultos deben evitar consumir cafeína y alcohol por la tarde y por la noche y, en su lugar, optar por una relajante taza de té de hierbas 

2. Ejercítate para dormir mejor

La falta de ejercicio también puede contribuir a un ciclo problemático de insomnio. Realizar poca o nula actividad física puede aumentar el estrés, lo que probablemente te mantendrá despierto durante la noche. A su vez, si no puedes dormir, es difícil que te mantengas activo debido a que tu fatiga durante el día aumenta. Y así, el ciclo continúa.

Los beneficios relacionados con el ejercicio son muchos, así que intenta activar tu cuerpo todos los días. Cuando se trata de descansar mejor, los ejercicios sencillos de intensidad moderada, como caminar o hacer yoga son una buena opción. Sin duda, los niños deben disfrutar de tiempo recreativo todos los días, y las caminatas largas en familia son una de las maneras en que pueden obtener los beneficios de estar en movimiento juntos.


3. Practica una buena higiene del sueño

¿Sabes qué es la higiene del sueño? Significa crear un ambiente y apegarse a rutinas que promuevan un descanso constante y tranquilo. La higiene del sueño es importante para todos, pero a quienes más beneficia es a los niños y los jóvenes adultos, ya que los prepara para el éxito a lo largo de su vida.
 

• Establece un horario: intenta ir a dormir y despertarte a la misma hora todos los días para crear un ritmo de sueño eficiente
• Relájate antes de acostarte: tómate un tiempo de 30 minutos a 1 hora antes de ir a dormir en el que tú y tus hijos realicen actividades que generen un estado de calma (por ejemplo meditar, escribir en su diario, leer, escuchar música relajante, etc.)
• Cuida tu espacio para dormir: los ambientes frescos, oscuros, silenciosos y libres de distracciones electrónicas son ideales para descansar. Pon en silencio los teléfonos celulares y apaga la televisión.
• Evita las siestas durante el día: si no puedes evitarlas, haz que duren periodos cortos de 30 minutos o menos para que no interfieran con el sueño en la noche